En el vasto mundo de la música, cada intérprete y compositor tiene una historia única que contar. Pablo Martín, un talentoso guitarrista y compositor, comparte con nosotros su viaje personal y profesional, marcado por la pasión, la exploración y el crecimiento constante.
El amor por la música se arraigó profundamente en su ser, y comenzó a profundizarse con los primeros acercamientos, en la adolescencia, a bandas como The Doors, y comenzó por o a poco a adentrarse en sonidos más allá de lo convencional. A los 19 años, recibió su primera guitarra como regalo. Desde ese momento, su viaje musical se convirtió en una búsqueda incesante de conocimiento y expresión.
La evolución de Pablo como músico ha sido multifacética. Desde clases iniciales en una institución hasta el autodidactismo impulsado por plataformas como YouTube, ha abrazado cada oportunidad de aprendizaje. También ha trabajado con diversos profesores particulares a lo largo de los años, explorando diferentes estilos, técnicas y sonoridades que han enriquecido su repertorio y su visión musical.
“No hay dos músicos iguales, por más que siempre haya cosas en común. Cada uno es único y tiene que ver con la esencia de cada persona. A mi me interesa mucho la exploración, me interesa mucho la búsqueda, ver siempre ‘qué más’ se puede hacer”, resume en diálogo con Fanes, mientras repasamos su presentación en la sala principal de nuestro espacio.
La experiencia en Fanes
Recientemente, Pablo tuvo la oportunidad de presentarse en nuestra sala principal, espacio que considera como un refugio para la creatividad y la expresión artística. Su experiencia en Fanes durante el pasado 13 de abril fue especialmente significativa, al presentarse con un ensamble de handpan, percusión, batería y bajo eléctrico.
La elección de Fanes como escenario para compartir su música se debe a varios motivos. Además de la calidad del espacio y la comodidad logística, el guitarrista destaca el trato cercano y el ambiente acogedor que brinda Abe, mentora y alma de este lugar. La relación se remonta a varios años atrás, cuando Pablo cursó como alumno de Abelarda en el Conservatorio de Música de Bahía Blanca, lo que generó un vínculo duradero y una confianza mutua en el ámbito musical.
Vale decir que además de su faceta como músico en vivo, Pablo Martín es un apasionado profesor de música, actividad donde vuelca un enfoque basado en la conexión personalizada con cada alumno, adaptando las lecciones a las necesidades y aspiraciones individuales de cada estudiante. “Se trata de sembrar; sembrar desde lo mejor de uno para con la otra persona”. Subraya conceptos que considera clave, trayendo a la memoria la actividad docente de su madre, que le marcó algo en su interior.
Desde clases individuales hasta talleres grupales con enfoque reducido, encuentra en la enseñanza una fuente de inspiración y crecimiento continuo.
«Se trata de sembrar; sembrar desde lo mejor de uno para con la otra persona»
El proceso creativo
Como compositor, Pablo encuentra su inspiración en la exploración constante de sonidos y técnicas. Su proceso creativo varía según el momento y la situación. A veces, una simple melodía surge de la experimentación con acordes en la guitarra, mientras que en otras ocasiones, la composición nace de la fusión de letras y música en un flujo intuitivo.
Su interés por la composición abarca desde la improvisación hasta la creación de arreglos y versiones originales de canciones. Además, está incursionando en el canto y explorando nuevas posibilidades sonoras con instrumentos como el handpan, el charango y el ukulele.
Mirando hacia el futuro
En cuanto a sus objetivos futuros, Pablo tiene en mente la grabación de su material original en un estudio profesional. Esta meta se suma a su pasión por la enseñanza, planeando seguir compartiendo su conocimiento y experiencia con estudiantes de todas las edades y niveles.
«No hay dos músicos iguales, por más que siempre haya cosas en común. Cada uno es único y tiene que ver con la esencia de cada persona»
Además, continúa explorando oportunidades para presentarse en vivo y compartir su música con audiencias cada vez más amplias. Su participación en eventos como meditaciones guiadas y recitales en Fanes es solo el comienzo de un camino lleno de oportunidades y crecimiento artístico.
La trayectoria de Pablo Martín es un testimonio del poder transformador de la música y el arte. Su pasión, su compromiso con la enseñanza y su constante búsqueda de expresión creativa son reflejo de un espíritu dedicado al autodescubrimiento y a la conexión humana a través de la música.